SER para GANAR mucho más dinero.

Ayer te hablaba sobre la conexión que nos lleva a estar presentes en el mundo y que nos permite tener esa mirada atenta que percibe esas señales que hacen que la vida se ponga en marcha.

Quizás es una visión más mística o espiritual de la que os tengo acostumbrados.

Pero presta atención:

No hay una vida bonita sin conciencia.

Da igual la mentalidad que tengas y lo estratega que seas. Si no hay presencia, eres un puto NPC, y por mucho que de vez en cuando tengas algún momento de lucidez, o si copias lo que hacen otros y te va mínimamente bien, no será más que un golpe de suerte.

(Si no sabes lo que es un NPC, búscalo)

Por mucho que copies, si no te conectas, no entiendes y solo te estarás quedando con la imagen estática que puedes cazar, pero no verás el movimiento.

He dedicado 15 años de mi vida a desarrollar una terapia, la Metaprogramación Cognitiva. Es la locura más maravillosa que se ha creado en el campo de la psicología, y parte de su magia es que profundiza en el todo de la mente y no se queda solamente en cada una de las partes fácilmente observables.

Y me he enfocado tanto en esa técnica porque, para estar presente y conectado, hay que estar emocionalmente sano, y tristemente las metodologías que existían no permitían sanar las heridas emocionales de las personas con la precisión y profundidad necesarias.

Cuando sanas las heridas, las personas dejan de mirar en todas direcciones y se dan el permiso de mirarse a sí mismas.

Solo cuando te permites ser, puedes estar.

Y desde ahí, desarrollar tu mentalidad para relacionarte con el mundo de un modo sano y funcional, siendo ambicioso en tus resultados.

Es por ello que, tras venir súper conectado de Japón, la primera Píldora que compartiré este sábado en el Programa de Inteligencia Evolutiva será enseñarte a:

 Ganar más dinero.

No trabajando más, sino descubriendo el valor oculto sobre el que te puedes apalancar para incrementar el valor que ya aportas. Y lo haremos aprendiendo a jugar con el precio que cobras.

Quiero que ganes más dinero para que te des cuenta de lo poco que importa el dinero, te quites esa piedra del zapato y podamos tratar temas más importantes. Pero entiendo que es difícil dejar de hablar de comida cuando uno pasa hambre, así que vamos a resolverlo.

Si fueras mi cliente, te diría:

“Cuando sanas, te permites SER.

Cuando eres, puedes ESTAR.

Cuando estás, VES lo que en realidad está sucediendo

y empiezas a cambiarlo por algo mejor. 

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