Nos asusta la libertad. Decimos sin parar que la amamos, pero la realidad es que nos aterra. Porque nos hace pensar en el rechazo, en la soledad, en el abandono. Y eso nos devuelve a esos momento de vulnerabilidad, de fragilidad que nos hicieron tanto daño.

Cuando la otra persona te dice NO. Aunque lo diga de mil formas distintas, siempre está diciendo lo mismo: NO.

Y ese NO, nunca es solamente un no. Es todo lo que dijimos, todo lo que nos contamos, todo lo que prometimos, todo lo que soñamos y que ya nunca va a suceder.

La mentira, la traición, el engaño… Son aceptables porque nos dicen que en realidad nunca fue verdad.

Pero esa persona que de forma honesta nos demuestra que no nos equivocábamos con ella, pero simplemente no quiere seguir adelante, no quiere seguir comprometiéndose y se va alejando, poco a poco, hasta desaparecer de nuestra vida.

Te deja con un vacío tan insoportable… que solo puedes culparle de algo que sabes que no es verdad, para poder odiarle y así ensuciar algo que no puede ser tan bueno y no ser tuyo.

Si fueras mi cliente te diría:

“El precio siempre lo pagas, antes o después. Pero lo terminas pagando.”

👇🏻 ATENCIÓN 👇🏻

Este sábado en la Membresía te hablo sobre el compromiso y te muestro un camino para que no tengas que volver a pasar por esto.

Pd: Las personas de la Membresía tienen un regalo para estas fiestas, si has estado por el Canal de Telegram o conoces gente que está dentro, ya sabes de que va.

En cualquier caso, el regalo se mantiene para las personas que se apunten a la Membresía, pero solo hasta este viernes a las 23:55h.

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