Eres víctima de las circunstancias cuando...

Si fueras mi cliente te diría:

La gente sufre cuando es víctima de unas circunstancias que ni entiende ni controla.

Es así de sencillo.

Y esperan (como bobos) que los demás se comprometan a estabilizar unas circunstancias a lo largo del tiempo. Sin darles un motivo para hacerlo.

Te estoy hablando del compromiso.

Soy una persona que no termina de entender el compromiso.

No me refiero a que no me pueda comprometer, o que no quiera.

Me refiero a que no necesito comprometerme ni que los demás se comprometan.

Porque comprendo la lógica de los incentivos.

Uy, ha dicho incentivos, materialista, eso es pecado, ahí no hay amor incondicional.

Correcto.

Aunque detrás de la incondicionalidad que tanto adoráis normalmente no hay amor, solo culpa.

En cambio, cuando aceptas la condicionalidad, asumes la responsabilidad y eso te lleva a dejar de ser un parásito y a desarrollarte para aprender:

Aquello que aportar.

A quienes aportarlo.

Bajo qué condiciones lo aportas.

Si entiendes la posición que ocupas respecto a la otra persona, prestas atención a lo que la otra persona quiere y defines los márgenes en los que estás dispuesto a relacionarte…

Dejas de sufrir.

Porque te da igual lo que hagan los demás ya que dejas de ser víctima de las circunstancias que los demás imponen.

Ya que las circunstancias las defines tú.

👇🏻 ATENCIÓN 👇🏻

Este sábado en la Membresía te hablo sobre gestionar la falta de compromiso.

Descubrirás todo lo que se esconde detrás de lo que sientes cuando esa persona no quiere darte el Sí.

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