Así se entra en el ciclo de la abundancia.

Ayer, en el Programa de Inteligencia Evolutiva, lo pasé genial. Pablo Herreros nos regaló una Masterclass privada para los miembros del Programa, una clase magistral y de un valor alucinante, sobre cómo podemos dejar de vender tiempo por dinero para aumentar ingresos y ganar libertad.

Todas las personas que tuvieron el privilegio de asistir vieron que fue extraordinariamente generoso con tooooodo lo que compartió.

Y yo, cada vez lo tengo más claro.

La generosidad y la abundancia van de la mano.

Los que tienen mucho hacen mucho por los demás, y eso inevitablemente hace que los demás también hagan mucho por ellos.

Esto aumenta su abundancia y, con ello, su riqueza.

Puedes pensar que no es así, que los ricos son malos y egoístas, pero esto no nos dice nada de los ricos. Solo refleja que tú no formas parte de ellos y que, muy difícilmente, lo harás.

Que la abundancia y la generosidad vayan de la mano tiene mucho sentido. La generosidad influye en tu cerebro de forma muy positiva.

La primera vez que leí algo en esta dirección fue en un libro de Tony Robbins. Comentaba que centrarse en uno mismo pone a tu cerebro en estado de alerta.

En plan: Si miro mi cuerpo para ver si estoy bien, es porque estoy en peligro.

(Esta es una asociación condicionada que nos acompaña desde hace miles de años).

Cuando dejas de prestarte atención y comienzas a prestar atención a los demás, tu cerebro se relaja porque interpreta que, si estás prestando atención a los demás, es porque tú estás bien.

En consecuencia, la emoción del miedo estresa tu organismo, mientras que el altruismo y el amor lo relajan.

El estrés intoxica y daña tu cuerpo. La relajación lo sana.

Puedes pensar que ser rico te lleva a estar relajado, y puede o no ser así.

Pero lo que mucha gente no entiende es que mirar a los demás, prestarles atención, cuidarles y ser generoso con ellos te lleva a estar relajado. Esto pone a tu cuerpo en un estado más sano, tu mente está más tranquila e inevitablemente todo ello hace que te despreocupes, que mires todavía más a los demás, que les prestes más atención y que tiendas a cuidarles.

Así es como, mediante la generosidad, entras en el ciclo de la abundancia.

Para terminar.

Ayer, Pablo Herreros fue generoso, y hoy quiero serlo yo con él y también con vosotros. Lo que él compartió no lo voy a hacer público porque forma parte del contenido de pago del Programa, pero sé que HOY, a las 18h, Pablo Herreros tiene un evento en abierto que ha titulado: “Convierte lo que sabes en un negocio digital escalable y con propósito”. Os recomiendo que, si os interesa emprender, os apuntéis y veáis el motivo por el que digo que Pablo es tan generoso, y entenderéis por qué le va todo tan bien.

PD: En dos semanas abrimos de nuevo las puertas al Programa de Inteligencia Evolutiva. Lo haré con un evento online gratuito en el que tocaré uno de los temas que más os han impactado en los últimos meses: Pon el mundo a tu favor.

Hablaré sobre la forma de incentivar a las personas de tu vida para que no solo dejen de crear problemas y de ser egoístas, sino para que se alineen contigo y vayáis juntos hacia una vida mejor.

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